Pecados capitales a la hora de comprar una máquina CNC

Desde la pertinencia en el nivel de tecnología, pasando por selección adecuada de las características técnicas, la proyección de uso y las alternativas de financiamiento, la decisión de compra de una máquina CNC puede acelerar o relegar la productividad y las finanzas de su taller.

Avanzar hacia la actualización tecnológica en máquinas herramienta dando pasos seguros es el objetivo de todo taller en la industria. En ese trayecto surgen dudas e inseguridades; cada oferta del mercado de metalmecánica suele mostrarse como un ‘mandamiento divino’ para la producción, y al mismo tiempo la falta de capital nubla la decisión de inversión en nuevos equipos. Este artículo lo invita a que haga una pausa: la cautela en todos los aspectos que tienen que ver con la compra de máquinas de control numérico (CNC) es crucial para alcanzar la máxima.

Los crecientes desarrollos en la optimización de los sistemas CNC, que involucran mayormente opciones de mecanizado de alta velocidad (high speed CNC milling machines); multitarea (done in one); o de remoción térmica de material, como el corte láser o la electroerosión, sin duda facilitan la tarea de manufactura, elevan la calidad del producto final y la productividad pero, al mismo tiempo, el nivel tecnológico superior de los equipos aumenta su costo inicial y disminuye la posibilidad de tomar la decisión de inversión. Lo que sí es claro es que la competitividad debe acompañar esa decisión.

Para guiar mejor esta decisión, Metalmecánica entrevistó a proveedores de máquinas herramienta CNC para que, a la luz de su experiencia en la comercialización, su asesoría constante, conocimiento de la distribución y testimonio de primera mano del avance tecnológico y el panorama financiero, expliquen cuáles son los desaciertos más comunes en los que incurren los talleres que están en el proceso de compra.

Lea también: Todo lo que debe saber sobre el control numérico por computadora o CNC

Exceso y omisión 

La tarea es aparentemente sencilla, aplicando la fórmula necesidad + capital + capacidad técnica. Sin embargo, poner a producir con una tecnología sin contemplar el límite de producción, el panorama viable para realizar variedad de proyectos, la capacitación para el seguimiento del sistema en la planta o la asistencia técnica por parte del proveedor, puede representar un desequilibrio en los procesos y alejarse de la eficiencia.

“Los errores más comunes es que elige una máquina, o muy equipada —pensando que van a utilizar muchas funciones, y gastan más de lo debido—, o se quedan cortos con las dimensiones de trabajo”, señala José Luis Cuevas, gerente de ventas foráneas de la compañía Maquhensa, para quien la solución está en adelantarse y prever la utilidad de la máquina; por ello, es indispensable identificar la pieza más grande en tamaño que se va a maquinar y las técnicas de corte que va a usar en su cadena de fabricación, para así comprar la máquina CNC que integre las funcionalidades adecuadas y sea de una dimensión mayor a lo estimado para futuros trabajos que exijan mecanizar piezas grandes.

Es necesario formularse estas preguntas al momento de buscar la CNC correcta:

• Identificar la pieza más grande a maquinar.
• Elegir la máquina con los procesos adecuados de mecanizado para dicha pieza.
• Preguntarse, “¿cuánto puedo invertir en el equipo para conseguir alguna marca que se adecue a mi presupuesto?”.

Otro error típico por omisión es, según Jacobo Acosta Aguilar, gerente de marketing de la firma distribuidora Intermaq, fundamentar la decisión de compra en el uso inmediato y con la idea que el funcionamiento siempre será óptimo. “Hemos notado muy a detalle que en ocasiones las decisiones de compra no tienen en cuenta si el distribuidor brinda apoyo en servicio, aplicaciones o refacciones. Estas medidas tienen un alto impacto en la vida útil y provecho que se puede obtener de un equipo elegido en bases más sólidas”, manifiesta el ejecutivo, por lo que actualmente Intermaq ha resuelto entregar un listado a evaluar por parte de cliente para que reconozca su verdadera necesidad.

Antes de efectuar una compra es necesario que se pregunte:

• ¿La máquina seleccionada cumple con los requerimientos del proyecto?
• ¿La máquina está respaldada por la calidad de la marca?
• ¿Me ofrecen servicio técnico?
• ¿Las refacciones son fáciles de obtener?
• ¿Cuál es el precio?

Por su parte, Salvador Icazbalceta, gerente general de la firma proveedora Heller, exhorta a que, más allá de las características de la máquina, hay tener un abanico de empresas que suplan la necesidad de compra en cuanto a tamaño de la máquina y su configuración, y que se adecúen al rango de precios. Además, considera que se debe solicitar un tiempo estimado de ciclo para establecer desde el principio el costo por pieza, y coincide en que es necesario valorar el nivel de calidad en la asesoría y tener en cuenta la oferta de refacciones de cada proveedor.

Evalúe los siguentes aspectos previo a adquirir una CNC:

• Decidir el tamaño de máquina.
• Seleccionar la configuración de la máquina.
• Determinar a tres proveedores de máquinas que cumplan las características anteriormente estudiadas.
• Considerar que los precios estén dentro del rango.
• Solicitar un tiempo estimado de tiempo de ciclo.
• Considerar que el proveedor ofrezca refacciones.

Injusticia entre precio y calidad

Para la mayoría de los talleres en América Latina los nuevos desarrollos en sistemas CNC son atractivas por las ventajas en la mejora de la productividad debido al mecanizado sin supervisión, la calidad superficial en los acabados disminuyendo las piezas defectuosas, la precisión, las tareas integradas para tornear y fresar en una misma máquina o su aprovechamiento de material, pero no dejan de ser costosas. Aún así existen fabricantes de componentes de diversos sectores que están integrando la reconversión tecnológica y adquiriendo maquinaria actualizada para cumplir con la exigencias del mercado de metalmecánica.

Y es que en la búsqueda de la máquina CNC adecuada persiste la competencia entre calidad y precio, dos factores igual de decisivos en el que alguno siempre debe ganar. Icazbalceta explica que en esta fase es un error “tomar la decisión en base al precio o por tratar de seguir un estándar de marca cuando otra puede cubrir mejor sus necesidades, o hacerlo con base a relaciones personales”.

Aplicando la regla de visualizar el aprovechamiento de la tecnología, el gerente general de Preci México, Miguel Carner, empresa distribuidora de máquinas herramienta, dice: “uno a veces cuando compra maquinaria se fija mucho en el precio y eso hace que se incline por una calidad un poco menor sin reparar que esa máquina la vamos a tener en el taller o en la fábrica durante 20 o 25 años. Nos conviene hacer una inversión inteligente de alta calidad”.

El fabricante debe guiar su compra en aspectos de competitividad y dice que:

• Los clientes tienen oportunidad si tienen calidad.
• Hay que ir un paso más arriba.

La naturaleza del sector hace que reciba respaldo financiero gubernamental o de instituciones público-privadas, aunque no son la única solución, pues mismas empresas fabricantes de maquinaria ofrecen sus propios esquemas de financiación para la instauración de nueva tecnología.

Para la tecnificación deben apelar a la pertinencia o, en otras palabras, se debe tener bajo la manga más de una alternativa, ya sea en la marca proveedora o en el presupuesto. Maquhensa, por ejemplo, adaptándose a la capacidad financiera y al alcance del proyecto de los fabricantes, ofrece un método de arrendamiento hasta por 48 meses o el método de financiación del 50 % hasta 18 meses con el 1 % de interés sobre saldos insolutos, detalla su gerente de ventas, Luis Cuevas.

Le puede interesar también:

Financiamiento para adquisición de maquinaria

Pero existen posibilidades aún más sugestivas, como lo analiza Chris Richardson, vicepresidente de capital para fabricantes de la compañía de financiamiento e intermediadora para el préstamo de equipos para la industria en Estados Unidos, Commercial Credit Group, en un artículo recientemente publicado en el portal de noticias de manufactura fabricantingandmetalworking.com, en el que resalta alternativas más allá de adquirir el capital completo mediante préstamos, una salida que siguen casi todos los talleres. En el texto, Richardson comenta que al pasar de los años los talleres adquieren un acervo propio de maquinaria, no obstante “lo que la mayoría de las empresas y los bancos ni siquiera consideran es utilizar el capital que estos equipos como garantía para obtener nuevas máquinas y tecnología, generando un efecto de reducción en la deuda, haciendo más cómodos los pagos mensuales y mejorando el flujo de caja”, explica el experto.