Fabricantes de autopartes en México, en el camino correcto

Información de la Industria Nacional de Autopartes (INA) señala que en 2013 el sector tuvo un crecimiento de 6 %, para alcanzar una producción de más de 78.000 millones de dólares; el pronóstico para 2014 sería muy similar, es decir, se espera un crecimiento aproximado de 6 %, con una producción esperada de 80.000 millones de dólares.

De acuerdo con Oscar Albín, presidente del organismo, del valor total de la producción del año pasado, 55.000 millones de dólares correspondieron a exportaciones, principalmente al mercado de Estados Unidos, aunque también crecieron en países como Brasil, Argentina y Colombia.

En relación con las importaciones, el directivo dijo que todavía se importan muchos componentes y materias primas para fabricar las autopartes, “lo que representa un reto importante para la sustitución de importaciones por parte de la industria”.

Al respecto, Eduardo Solís, presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), indicó que se requiere fortalecer la cadena de proveeduría en los niveles dos y tres, los cuales representan una clara oportunidad de inversión.

De acuerdo con datos de ProMéxico, de las importaciones de autopartes contabilizadas hasta 2012, a piezas de troquelado y estampado correspondieron 11.800 millones de dólares; a productos de fundición 9.000 millones, y a forja 9.200 millones.

“El objetivo es lograr un mercado doméstico que atraiga mayores inversiones y convierta a México en uno de los tres principales destinos en el mundo para la producción y diseño de autos y componentes”, añade Albín.

Por su parte, Manuel Montoya, director del Clúster Automotriz de Nuevo León, indicó que eventualmente el desarrollo de la ingeniería que se realiza en el país llevará a una sustitución de importaciones.

“El sector autopartes ha crecido de manera continua desde 2009. En el caso de Nuevo León, se mantiene este crecimiento y empresas como Metalsa, Nemak, Katcon, Quimmco y Ternium, están realizando desarrollos de nuevos materiales, para darles calidad a los productos, y lograr mejores procesos de manufactura”, destacó el especialista.

Inversiones y otros aspectos

Según datos de la INA, el año pasado la industria de autopartes recibió inversiones por más de 1.400 millones de dólares, principalmente para proveedores de primer y segundo nivel. Para 2014, el organismo pronostica la llegada de por lo menos 400 millones de dólares de más inversión.

“El año pasado la industria generó cerca de 600.000 empleos directos en autopartes, y por cada empleo de la industria terminal, la de autopartes genera de seis a siete directos. Por eso, el gobierno trata de atraer plantas, por lo que genera alrededor”, indicó Albín.

En otro orden de ideas, el directivo señaló que en relación con el crecimiento del mercado negro de autopartes en el país, buscan promover normas de calidad en autopartes.

“Eso podría frenar el problema. Hoy llevamos 18 meses de trabajo con autoridades de la Dirección General de Normas. Debimos empezar hace 10 años, pero lo importante es que ya lo hicimos. Si bien no es un problema que perjudique gravemente al sector en este momento, es necesario tomar medidas antes de que la actividad quede fuera de control”, explicó el directivo.

Por otra parte, de acuerdo con Kenzo Doh, director del Proyecto para el Fortalecimiento de la Cadena de Proveeduría del Sector Automotor en México, otro de los desafíos de la industria se relaciona con la capacitación.

“Los fabricantes de autopartes mexicanos requieren capacitarse adecuadamente, sobre todo en el área tecnológica, para hacer frente a los requerimientos de las nuevas armadoras japonesas que están llegando al país”, indicó Kenzo Doh.

Añadió que uno de los principales problemas que han identificado, se relaciona con las líneas de fabricación de los proveedores, que solo atienden la calidad en la inspección final, lo que le representa un alto costo, amén de que no cuentan con la capacidad suficiente para atender volúmenes de producción.

“Otro aspecto que hemos observado es la alta rotación de personal, que implica un problema, ya que las compañías invierten en la capacitación y transferencia de conocimientos a los empleados y luego estos buscan mejores salarios en otras empresas”, refirió el directivo.

La visión de los fabricantes de autopartes

Según Rodolfo Ruvalcaba, responsable de calidad y metalurgia de la empresa Sisamex, México pierde oportunidades de proveeduría debido a aspectos como la falta de apoyo para la inversión y a que las empresas del sector no tienen una mayor iniciativa para entrar al mercado de autopartes.

Sobre temas de inversión, Héctor Galván, director general de planta de la empresa Rassini Frenos, indicó que luego de la crisis económica mundial del año 2009, el crecimiento de la empresa ha sido de 23 % en promedio; sin embargo, el año pasado el crecimiento de la industria automotriz fue de 35 %.

Galván añadió que la empresa invertirá aproximadamente 40 millones de dólares este año, con el objetivo de ampliar la planta de fundición. Se espera que con esta inversión, la capacidad de producción anual de la empresa pase de 120.000 a 170.000 toneladas.

“Las inversiones también están vinculadas a los proyectos que hemos concretado desde hace año y medio en relación con el abastecimiento de discos de frenos para vehículos nuevos que saldrán al mercado, de marcas como General Motors, Ford, Fiat-Chrysler, Maserati y Nissan, entre otras”, indicó Galván.

Actualmente, la empresa se encuentra en negociaciones para convertirse en proveedora de la armadora Audi; “en caso de concretarse el acuerdo, tendríamos que hacer una inversión adicional en líneas de maquinado para la planta”.

La compañía japonesa Hitachi Automotive Systems también realiza inversiones en su planta del Parque Industrial Querétaro y la expectativa es llegar a 110 millones de dólares para 2015.

En conferencia de prensa, durante la inauguración de la planta, el presidente del Consejo de Administración de la empresa Kunihiko Ohnuma, refirió que establecer una nueva planta en Querétaro tiene como objetivo aprovechar el desarrollo hacia el futuro en los mercados mexicanos y fortalecer la demanda en América, aprovechando los tratados de comercio que tiene México.

En Puebla, la empresa Luk (Grupo Schaeffler) invertirá más de 1.000 millones de pesos para construir su segunda planta en la entidad.

Mark McGrath, presidente de la división de transmisiones Región América del Norte de Luk, explicó en conferencia de prensa que tienen un proyecto bien consolidado de expansión en Puebla, y que la ubicación geográfica es idónea para desplazar sus productos hacia el norte y sur del país.

“La planta estará lista y en operación en el año 2015. Empezaremos a capacitar al personal este mismo año y esperamos tener una excelente competitividad global”, indicó.

Otra empresa que inició operaciones en México, concretamente en el estado de San Luis Potosí, es la compañía japonesa Keihin. La inversión fue de 49 millones de dólares.

El presidente de Keihin Corporation, Tsuneo Tanai, dijo en el marco de la inauguración de la planta que la compañía busca hacer la transferencia de sus líneas de producción de Norteamérica, con el objetivo de robustecer su cadena de abastecimiento a empresas como Honda y Volkswagen.

“Con ello se detonarían las cadenas productivas con proveedores de insumos, bienes y servicios locales, así como la eventual creación de pymes que surtan tanto a esta como a otras plantas”, indicó.

El futuro

Para Alejo Zúñiga, gerente de Aseguramiento de Calidad de la empresa Lincoln Electric Manufactura -ASQ México, en México existe una dependencia tecnológica (sobre todo de muchas empresas medianas y pequeñas) y una falta de inversión en este sentido.

“Esta situación provoca que los proveedores se vayan rezagando y pronto sean desplazados por nuevos jugadores del ramo. La industria de proveedores debe actualizar su oferta educativa especializada, buscar insumos para tener costos de fabricación competitivos y procesos en altos estándares de fabricación”, indicó.

Al respecto, Carlos Fuentes, director ejecutivo de Promoción Internacional de la Unidad de Promoción de Inversiones y Negocios Internacionales de ProMéxico, indicó que se están enfocando en apoyar a los proveedores de la industria terminal, porque consideran importante fortalecer las cadenas de suministro en México.

“A escala internacional se están presentando proyectos para atraer capitales, por ejemplo, de los procesos de forjado o inyección de plásticos, que podrían hacer más competitiva a la industria”, explicó.

Finalmente, el subsecretario de Industria y Comercio de la Secretaría de Economía, José Rogelio Garza, refirió que la proveeduría es uno de los motores de la industria automotriz.

“El potencial de la proveeduría está en constante crecimiento ante la continua llegada de nuevas armadoras y, por ello, se ha desarrollado una política específica, para garantizar el mejor desempeño de la cadena de suministros a las armadoras”, añadió el funcionario federal.

Detalló que se han identificado los eslabones de la cadena de proveeduría con menos contenido nacional, entre los que destacan los estampados, mecanizados, forja e inyección de plástico.

“Si podemos hacer más procesos o piezas en México, se elevará el contenido nacional. Y si la industria automotriz continúa creciendo, crecerá la parte de proveeduría”, finalizó.