DMASI: no nos convirtamos solo en maquila, aportemos con talento

DMASI: no nos convirtamos solo en maquila, aportemos con talento

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Para Gabriela Aguilera de DMASI, México esta en un momento de oportunidad donde la industria tiene mucho que aportar desde el talento para desarrollar, para software e ingeniería, que debe aprovecharse para mostrar la competitividad nacional y de la región.
 


DMASI - Diseño de producto más ingeniería de manufactura, es una empresa en el rubro de la fabricación y diseño de herramentales. Su directora, Gabriela Aguilera fundó la compañía en 2012 y con la experiencia profesional y académica de más 20 años, desde sus estudios como Licenciada en Diseño Industrial de la Universidad de Guadalajara y Diplomado de Negocios de Goldman Sachs / ITESM, ha combinado su carrera en lo que hoy es su empresa con una oferta de servicios que apuesta a las tecnologías, el talento joven, la innovación, y la sinergia entre pares industriales, en conjunto con una administración sólida, lo que le han dado a DMASI la visión de: "Posicionar a México en la fabricación de herramentales de calidad como una empresa de clase mundial".


DMASI esta ubicada en Apodaca, Nuevo León y sirve a industrias como automotriz, energética y electrodomésticos.

 

Su trayectoria profesional la llevó a apasionarse por la industria 

Su carrera profesional la fue desarrollando en diferentes verticales que le hicieron enamorarse de la industria de herramentales. Trabajó en empresas nacionales como Urrea (ferretería), Sello Rojo (alimentos), Metalsa (piezas metálicas), entre otras. "Estaba en ese momento en que pagas por aprender y todo es como venga, yo lo quiero conocer. Así aprendí de diseño de producto, manejo de máquinas CNC, diseño de moldes de inyección de plástico, programación, entre otros, y fue la experiencia de estar ahí en piso viendo como se hacen las cosas... yo tenía un hambre voraz por aprender, lo que me empezó a apasionar, la transformación de los materiales, la manufactura, así descubrí que me gustaba y quería seguir por ese camino. Y pase a una etapa en la que me conocían de otras empresas y me jalaban automáticamente a trabajar con ellos" reseña Gabriela.

En medio de estas oportunidades decide irse a Monterrey "en mi mente era Monterrey, yo tenía esta fijación, para mí allá estaba toda la onda industrial... viéndolo en retrospectiva, fue esa pasión sobre las cosas que hago, por mi profesión, y sí, yo estaba muy capacitada pero, acá la competencia y el nivel de ingeniería que se tiene es otro, entonces estuve tocando puertas, pero afortunadamente el conocimiento te las abre y empecé a trabajar en TecnoTroqueles y me fue muy orgánico el crecer en esa área, porque ya tenía cimientos de metalmecánica, de diseño de ensambles y de moldes" reseña. 

"Después de un año, me buscan y empiezo a trabajar en un Joint Venture para una filial del Grupo Proeza y una compañía japonesa Ogihara. Fue también de mucho crecimiento para mí y de conocer otras cosas, otro nivel de manufactura, desde el tamaño de las máquinas, el tamaño de los troqueles, el tipo de troqueles, ya no era herramientas pequeñitas y el tema de la ingeniería inversa, cómo había que reproducir un componente dañado de un día para otro porque la máquina estaba en paro... eso me dio también muchas herramientas, un sentido de urgencia, de cumplimiento y de entender a la industria automotriz" relata. 

Adicional, su experiencia en el ámbito nacional la llevó a  una empresa norteamericana situada en Chicago, Illinois, en la industria farmacéutica.  "Me fui a trabajar Estados Unidos a una empresa, que nada que ver con troqueles, pero me llamó mucho la atención lo que yo iba a hacer allá que era moldes de soplo ya que fabricaban máquinas para la industria farmacéutica, como los encapsulados tipo las ampolletas... Yo tenía ya casi un año y con mi perfil de una cultura de Monterrey de trabajo, aparte de diseño de producto, hacía diseño de molde, hacía el set up de la máquina, programaba, veía el proyecto de gestión con el cliente, coordinaba el taller de Tool Room porque necesitaba que las piezas salieran, me movía en todo lo largo de la empresa... Y fue donde descubrí que realmente lo mío era emprender, que todo este tiempo fue una preparación, y que yo ya debería poner mi empresa, así de confiada y capaz me sentía, y decido regresarme".
 

Emprender con herramientas de administración y la profesionalización del negocio

Gabriela empezó desde el rol de freelance en diseño, desde su casa con un computador y acceso a software, y al ir creciendo sus servicios vio la necesidad de involucrarse con el ecosistema de emprendimiento, encontrando la oportunidad para formarse con un diplomado de negocios, esta capacitación le abrió un panorama de oportunidades "el hecho mismo de saber que no era ya una freelance, sino que ya estaba pagando inpuestos, ya tenía colaboradores, pues yo ya era una empresaria, y es ese cambio de mindset fue muy importante para todo lo que vino después que fue la profesionalización de la empresa" reseña. 

Fue becada para el diplomado "10,000 Women" que capacitaba a mujeres en ámbitos de negocio para activar la economía de los países en desarrollo, complementando sus estudios.

 

"Constituí la empresa y a partir de ahí empecé en un tema de diseño, y del 2017-18 me compré maquinaria y armé equipo de egresados de ingeniería y empezamos este hacer servicio de ingeniería inversa y nos fue muy bien... Con el background de diseño, de ingeniería inversa, el brinco orgánico y natural era la manufactura de lo que ya estábamos diseñando, 2019" menciona. En esta nueva apuesta tuvieron que sortear la situación vivida por la pandemia, "los créditos que tenía para capital, trabajo o para activos,  se fueron en servicios y nómina... pero nos mantuvimos y seguimos". 

DMASI hoy se oferta como una compañía de soluciones multidisciplinaria en un solo proveedor, generando en su propuesta de servicios diferentes tecnologías, desde la ingeniería donde trabajan diferentes tipos de proyecto, el tema de los herramentales y otros que obedecen más a un tema de Desarrollo e Innovación que pueden considerarse retadores, para Aguilera "son así retadores y especiales porque donde están lo proyecto complicados, está el dinero". 

Por ejemplo, cuenta que uno de los proyectos en manufactura aditiva que  han trabajado fue la sustitución de piezas, unas cavidades para moldes de vaciado de plomo. "Estas cavidades son de acero inoxidable y están ensambladas de cuatro componentes, lo que buscan es que la pieza sea hueca, en la manufactura tradicional  hacen como muchos ensambles soldados para que te dé las características, y esta pieza lo que necesitaba era un enfriamiento interior y se lograba solamente con cuatro piezas soldadas, ¿cuál es el problema de este producto?, que obviamente la soldadura no era hermética completamente, les fugaba agua, se convertía en un problema para producción. Entonces era una pieza muy cara, llevaba mucha manufactura y mucho ajuste, nosotros encontramos este tipo de proyectos y empezamos a hacer la propuesta de reemplazarlo con impresión 3D de acero inoxidable, el mismo que están usando para la manufactura tradicional, podemos reemplazar eso con esta impresión 3D que conforme al diseño ya sale con el enfriamiento interior, ya no es algo que tengas que soldar, ni sellar, únicamente rectificas algunos ajustes y ya, probamos que sí funcionan, que si reemplaza y que de hecho tiene mejoras en cuanto a un enfriamiento más eficiente y en cuanto a tiempo de proceso" explica la Lic. Aguilera.


En estos proyectos señala que es una inversión de tiempo y dinero, dado las pruebas que se hacen para demostrar la efectividad al cliente hasta comprobar que funcionan y que este genere la orden de compra; además que han encontrado una ventaja al poder hablar con los usuarios del producto, no solo con el comprador, para entender la necesidad que se esta resolviendo y tener el insight del nivel de resolución que pueden lograr. 

"Entonces, por ejemplo, en ese proyecto, cuando llevamos el primer inserto el operador decía que no iba a funcionar porque siempre lo habían hecho de la otra manera y cuando probaron la pieza y vio que tuvo un mejor desempeño logramos esa evangelización de que la tecnología viene a resolver, de ya no lo sigamos haciendo de la manera tradicional porque es costoso para ti, para tu empresa y para todos" resalta.

Es así que ahora encuentra un cambio de perspectiva en el cliente, que antes presentaba resistencia a invertir en diseño e ingeniería y solo consideraba el tangible, las piezas, destaca "es algo que nosotros hemos educado al cliente, de que se resuelve a través de diseño, ese intangible que tiene un costo porque son horas, es conocimiento, etc. Entonces lo vamos a educando de saber que es algo por lo que se tiene que pagar".

Pioneros en la formación de talento joven y equidad de género

DMASI ha creado un semillero de talento al invertir en la formación integral de jóvenes, desde el diseño hasta las operaciones, enfocándose en formar jugadores. Su programa de capacitación se centra en la competencia laboral, con la convicción de que la inversión inicial se rentabilizará al mantener estándares de calidad. La empresa busca la integración de capacidades entre las áreas técnica y de diseño, eliminando estigmas y promoviendo un ambiente donde ambas experiencias se valoren.

Por otra parte, en un esfuerzo por promover la inclusión y el empoderamiento femenino en la industria, Gabriela ha asumido la responsabilidad de hacerse visible y participar activamente en diversas asociaciones e iniciativas relacionadas con el sector industrial. Para mas información lo invitamos a leer esta historia completa aquí 

 

Competitividad de México en la fabricación de herramentales

Para la empresaria, hoy México esta en capacidad de competir con profesionalización y preparación. Y señala que ante la competencia de mercados asiáticos en el ramo de los herramentales es necesario la colaboración entre industria, así como proteger y valorar lo local. 

"La mayoría de las personas o de las empresas que requieren herramentales lo traen de China, Corea, entre otros países, siendo que aquí hay la capacidad de poder hacerlo, a lo mejor no al 100 % desarrollado pero hay talento, pero si no damos la oportunidad, sino capacitamos, si no tenemos ese drive por crecer, pues pues vamos a seguir en la misma, no con una ingeniería per se". 

Su trabajo desde el Clúster de Herramentales le ha ayudado a desarrollar esta visión donde señala se busca trabajar en conjunto, generando en esta industria un sentido colaborativo y de sinergia para crecer "si algo entendimos aquí y pienso que es un tema local es ese mindset de colaboración, si algo nos libró de la pandemia es que nos echamos la mano entre todos" reseña.

Asimismo, señala que prefiere lo local porque tiene una repercusión de beneficio a la comunidad, empresa, Estado, e invita a pensar más allá del costo "a lo mejor el costo es poco si me la traen de China, el costo de la pieza, pero si hablas de un costo de un impacto ambiental, de que la pieza viene desde no sé cuántos miles de kilómetros, de que las condiciones de trabajo no son las mismas que a mí el gobierno me exige en este país, yo aquí tengo un compromiso de patrón, de bienestar social para mis empleados, que cuesta dinero y entiendo por qué las cosas cuestan lo que cuestan aquí". 

 

Las nuevas oportunidades que trae el Nearshoring 

"Hoy empresas estadounidenses están volteando para ver acá el tema, ya no solo de manufactura, sino el cómo resolvemos, el tema la ingeniería y del diseño, ya lo estamos profesionalizando y están volteando a pedir los servicios de este lado" indica la empresaria que es donde debemos poner hincapié para no convertirnos solo en maquila, sino que aportemos con el talento que tenemos "tenemos muchísimo talento para desarrollar, para software, para ingeniería. No nos convirtamos en el patio trasero sucio que solamente hacen maquila y yo creo que eso es una gran oportunidad".

Ante esto destaca que la apertura se debe aprovechar a ver desde México los servicios que se están ofreciendo y se están profesionalizando; sin embargo señala que hay retos en cuanto a precios y competitividad "están queriendo los compradores adquirir las cosas aquí al precio que lo estaban trayendo de allá, y pues no es así" y señala que hay empresas que están asumiendo bajar los precios para poder tomar los proyectos pero esto no será sostenible y perjudica el ecosistema empresarial.


 

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