6 problemas frecuentes durante el rectificado

El rectificado es un proceso de producción muy extendido y desde hace mucho tiempo es una parte fija de casi todos los entornos de producción industrial. Durante el rectificado, las partes (piezas de trabajo) reciben literalmente el "pulido final". Por tanto, las operaciones de rectificado contribuyen en gran medida a la calidad de la pieza acabada. Sin embargo, a menudo pueden surgir problemas durante el proceso.

El mayor y más conocido es, sin duda, la quemadura por rectificado, que es un daño térmico en la zona del borde de la pieza. La quemadura por rectificado se produce cuando se canaliza demasiado calor hacia la pieza. El resultado suelen ser microfisuras y superficies frágiles. La aparición de la quemadura por rectificado depende de una serie de factores y de las interacciones entre ellos. Los problemas más frecuentes durante el rectificado son:

Alimentación excesiva:

En el rectificado de piezas, el proceso genera una gran cantidad de calor que, en el mejor de los casos, se elimina con las virutas y el lubricante refrigerante. Sin embargo, es imposible evitar que parte del calor entre en la pieza. Mientras la entrada de calor en la pieza no sea demasiado grande, esto no supone ningún problema para el proceso de producción. Sin embargo, si la entrada es demasiado alta durante el rectificado y no hay suficiente refrigeración, entra tal cantidad de calor en la pieza que se produce una quemadura por rectificado. Otros parámetros de proceso mal seleccionados también pueden tener el mismo efecto durante el mecanizado de la pieza. La auditoría de refrigerante de Grindaix GmbH proporciona un análisis exhaustivo, durante el cual el proceso se examina en detalle.

Rectificado con muy poco lubricante refrigerante:

Para que un proceso de rectificado funcione sin que se produzcan quemaduras por rectificado, es esencial garantizar un suministro adecuado de lubricante refrigerante a la zona de mecanizado. Una gran parte del calor residual del proceso se aglutina y se transporta en el lubricante refrigerante. Sólo una parte del calor generado es absorbido por la pieza, lo que reduce considerablemente el riesgo de quemaduras por rectificado. 

A menudo, el lubricante refrigerante se utiliza generosamente en las máquinas-herramienta en un intento de conseguir un proceso con cero quemaduras por rectificado. Sin embargo, ni siquiera el uso masivo de lubricante refrigerante conseguirá evitar las quemaduras por rectificado si no es capaz de llegar al lugar de mecanizado de forma selectiva y a la velocidad de salida adecuada.

Si se utilizan boquillas Grindaix durante un proceso de rectificado para el suministro de lubricante refrigerante, es posible aprovechar la pantalla de refrigerante para supervisar el flujo de volumen preciso en l/min y la velocidad de salida del lubricante refrigerante de la boquilla en cualquier momento. Esto genera seguridad en el proceso.

Rectificado con parámetros de proceso erróneos:

Para que el lubricante refrigerante llegue de forma óptima a la zona de mecanizado, es necesario establecer una relación precisa entre la velocidad de giro de la muela y la velocidad de salida del lubricante refrigerante de la boquilla. Una vez encontrado este punto de funcionamiento, la tarea de mecanizado se desarrolla de forma óptima. Sin embargo, si se modifica un parámetro, como la velocidad de giro de la muela, suele producirse una quemadura de rectificado, ya que la velocidad de salida del lubricante refrigerante debe adaptarse en este caso a la velocidad de giro modificada. 

Para que esto no tenga que llevarse a cabo manualmente, Grindaix GmbH ofrece sistemas de control de bucle cerrado que, combinados con el PLC (control lógico programable) de la máquina herramienta y la electrónica de la bomba, implementan los ajustes pertinentes de forma totalmente automática. El control de bombas y válvulas basado en las necesidades también se consigue con el controlador de refrigerante Grindaix.

Rectificado con boquillas erróneas y/o mal alineadas:

Debido a su "carácter de fontanería", el suministro de lubricante refrigerante a menudo no está completamente pensado. Esto es un error, ya que el suministro de lubricante refrigerante contribuye de forma decisiva a la fiabilidad del proceso de mecanizado. Por lo tanto, las tuberías con abrazaderas o construcciones similares no pueden representar una solución adecuada para el suministro de lubricante refrigerante.

Para transportar el lubricante refrigerante al lugar de mecanizado con fines de refrigeración, se recomienda el uso de boquillas de aguja, ya que el flujo laminar del lubricante refrigerante permite dirigir el chorro de forma muy selectiva al lugar de mecanizado. Además, la velocidad de salida puede ajustarse con exactitud, de modo que todos los parámetros del proceso pueden alinearse con precisión.

Para conseguir no sólo el suministro directo de lubricante refrigerante en la zona de mecanizado, sino también para transportar el lubricante refrigerante a través de la muela, se pueden utilizar boquillas de lubricante refrigerante para la saturación. Estas boquillas limpian los espacios de poros libres de la muela y los llenan de lubricante refrigerante antes de que la muela vuelva a entrar en contacto con la pieza. El lubricante refrigerante así transportado se introduce con precisión en la zona de mecanizado y puede refrigerar allí el proceso de forma fiable.

Carga de la muela:

Si una muela está muy cargada, los espacios de los poros se obstruyen. Esto significa que la muela ya no puede transportar ningún lubricante refrigerante y las virutas eliminadas ya no son conducidas de forma fiable fuera del lugar de mecanizado. En este caso, se recomienda el uso de boquillas de limpieza para aprovechar al máximo la muela. Las boquillas de limpieza son boquillas que han sido diseñadas especialmente para eliminar los residuos del mecanizado de la muela con la ayuda del lubricante refrigerante. Las soluciones de boquillas combinadas permiten abastecer el lugar de mecanizado y limpiar la muela con una sola línea de suministro de lubricante refrigerante.

Si necesita garantizar un suministro fiable de lubricante refrigerante para una tarea de mecanizado en particular, se recomienda el uso de boquillas especiales adaptadas a este proceso. Grindaix GmbH es su socio competente con larga experiencia en el desarrollo, fabricación e implementación de boquillas especiales en su máquina herramienta.

Enfriamiento insuficiente durante el rectificado:

La refrigeración durante el rectificado previene el daño térmico de la pieza y de las herramientas de rectificado. La eliminación del calor del proceso se consigue mediante el suministro de lubricante refrigerante dirigido a la zona de mecanizado. Para ello, debe entrar suficiente lubricante refrigerante en la zona de mecanizado. Además del volumen de lubricante refrigerante necesario, también es importante la alineación correcta de las boquillas de lubricante refrigerante. 

Si el lubricante refrigerante no entra al 100% en la zona de mecanizado, absorbe menos calor del proceso y puede producir una quemadura por rectificado. El suministro de lubricante refrigerante basado en las necesidades y orientado a objetivos es la base para lograr una refrigeración óptima durante el rectificado.

A menudo, el suministro de lubricante refrigerante se realiza a través de simples boquillas de lubricante refrigerante (por ejemplo, tubos con extremos de abrazadera). Si se producen daños térmicos durante la producción, el cambio de las boquillas de suministro de lubricante refrigerante puede resolver los problemas. Dependiendo de la rectificadora y del proceso de rectificado, hay una serie de boquillas de lubricante refrigerante que garantizan el suministro de lubricante refrigerante según las necesidades (puede encontrar ejemplos aquí). 

Otras ventajas de una refrigeración óptima pueden ser una mayor vida útil de las herramientas de rectificado y una mayor productividad del proceso de rectificado (por ejemplo, mediante menos rechazos y mayores cifras de producción).